Nos movemos con el tiempo y lo que se construyó permanece. Teotihuacan, sus pirámides y recintos mantienen la majestuosidad de lo que hoy conocemos y mueven la imaginación de lo que pudo haber sido. La Pirámide del Sol siempre asoma, impresionante
La última vez que estuvimos aquí (en 2010) no entramos en el museo. Hoy sí. Recoge una colección de objetos encontrados en la zona, objetos que muestran la gran influencia y lo importante que fue Teotihuacan durante sus siete u ocho siglos de existencia (desde el siglo 100 a.C. hasta los siglos VII u VIII). Me gusta mucho ver la gran maqueta de la ciudad
En las avenidas y caminos, los vendedores son una constante
Tampoco recuerdo haber subido a la Pirámide del sol. Desde allí se alcanza a ver la de la luna,
los caminos entre ésta
y la de Quetzalcoatl al fondo
Se dice que en el primer milenio a.C., Teotihuacan fue quizás una de las ciudades más grandes de la América precolombina. Su población llegó a ser de 125.000 habitantes, lo cual la convertía en una de las seis ciudades más grande del mundo en aquel momento. Teotihuacan se convirtió en centro religioso en el valle central de México cerca del siglo I y en el complejo religiosos era donde vivián los curas, los soldados y los dirigentes. El pueblo llano vivía fuera del recinto sagrado.
La Pirámide del sol es la más alta de Teotihuana y una de las más grandes de mesoamérica. El nombre se los dieron los mexicas, quienes visitaron la ciudad muchos siglos después de que ya hubiera sido abandonada. Se desconoce su nombre original y contó con 224 metro de ancho y 75 metros de alto.
Cuesta subir pero merece la pena la panorámica, de cerca y de lejos, al subir y al bajar
Hay que imaginarla pintada y revestida también con murales. Muy poco queda de las pinturas de jaguares, estrella y serpientes pintadas veneradas y pintadas en los muros
La Pirámide de la luna se sube con menos dificultad
Marca el norte de la Avenida de los muertos
y desde allí la vista es espectacular tanto de la Pirámide del sol como de la Avenida
La página del INAH dice que
"al igual que la Pirámide del Sol, este fue un edificio fundamental para el desarrollo del culto público auspiciado por el gobierno. Forma parte de un amplio complejo urbanístico conocido como Plaza de la Luna. [...] Varias intervenciones arqueológicas habían sido dedicadas a la conservación y consolidación de la estructura, sin embargo hasta hace muy poco tiempo es que empezamos a conocer las funciones y actividades que encierra esta construcción. El “Proyecto Pirámide de la Luna” es un esfuerzo multidisciplinario e internacional orientado a conocer la estructura interna del edificio. Para ello, se diseño un ingenioso sistema de túneles que permitieron literalmente penetrar la pirámide.
Así, pudimos conocer la existencia de siete etapas constructivas, siendo la última cerca del año 400 de nuestra era. Esta última etapa es la que el visitante puede observar hoy en día en el sitio arqueológico. Tres de los siete edificios fueron consagrados con diversos rituales que muestran la existencia de ceremonias muy complejas y espectaculares. Estos depósitos rituales se encuentran enmarcados por el sacrificio de varios individuos, muchos de ellos cautivos, acompañados de diversos animales y cientos de artefactos, como cuchillos, puntas y excéntricos de obsidiana, cerámica, así como ornamentos de jadeíta y concha.
"al igual que la Pirámide del Sol, este fue un edificio fundamental para el desarrollo del culto público auspiciado por el gobierno. Forma parte de un amplio complejo urbanístico conocido como Plaza de la Luna. [...] Varias intervenciones arqueológicas habían sido dedicadas a la conservación y consolidación de la estructura, sin embargo hasta hace muy poco tiempo es que empezamos a conocer las funciones y actividades que encierra esta construcción. El “Proyecto Pirámide de la Luna” es un esfuerzo multidisciplinario e internacional orientado a conocer la estructura interna del edificio. Para ello, se diseño un ingenioso sistema de túneles que permitieron literalmente penetrar la pirámide.
Así, pudimos conocer la existencia de siete etapas constructivas, siendo la última cerca del año 400 de nuestra era. Esta última etapa es la que el visitante puede observar hoy en día en el sitio arqueológico. Tres de los siete edificios fueron consagrados con diversos rituales que muestran la existencia de ceremonias muy complejas y espectaculares. Estos depósitos rituales se encuentran enmarcados por el sacrificio de varios individuos, muchos de ellos cautivos, acompañados de diversos animales y cientos de artefactos, como cuchillos, puntas y excéntricos de obsidiana, cerámica, así como ornamentos de jadeíta y concha.
Ahí estamos
El tráfico es constante tanto de subida como de bajada
En La ciudadela recorremos las habitaciones de los guerreros, el conjunto de los jaguares y en especial el patio de los pilares que acaban de restaurar en el palacio de Quetzalpapálotl. Este lugar pudo haber funcionar como la residencia de la élite teotihuacana. Su nombre significa "mariposa preciosa" y se le conoce así por as columnas talladas que delimitan el patio central del edifico, las cuales forman parte de los prórticos que enmarcan la entrada al as habitaciones principales. Las columnas de piedra están talladas profusamente con representaciones de quetzales y lechuaz, motivos que contaron con pintura e incrustaciones de obsidiana
El sol pica
Caminamos por la Avenida hasta la pirámide de Quetzalcoátl. Descansamos en el camino. Nos sentamos y miramos un momento atrás
Ahí está la pirámide, la más elaborada oculta por otra construída posteriormente en el siglo VI. Fue descubierta en 1918. Las esculturas que cubrían los lados visibles de esta pirámide-templo fueron
destruídas intencionalmente y la fachada fue cubierta por
una nueva estructura, lo cual permitió que se conservara mejor. En esta pirámide fueron descubiertos más de doscientos cadáveres que se suponen que fueron de personas sacrificadas. Por esto se cree que la pirámide es una representación de Tonacatépetl, la montaña sagrada de la mitología mesoamericana que constituía el
centro del universo y de donde provenía el mantenimiento de los seres
humanos
Desde allí volvemos a ver la Pirámide de la luna
y después de bajar,
emprendemos el camino de regreso
El tiempo pasa y todo sigue su curso
1 comentario:
Aquí estuve casi un día entero, subiendo a las pirámides, viendo el museo y recorriendo la avenida de los muertos. Tu entrada me trae gratos recuerdos.
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