viernes, enero 23, 2015

Esas pequeñas grandes cosas

Uno de los poderes que tiene la música es su capacidad de evocación, el ser índice directo de emociones, recuerdos, memorias.
Creo que la comida también es así. El sabor. El aroma.
Los olores te llevan directamente a la casa donde hoy sabe a ajos dorados en aceite de oliva, a pimentón brevemente escaldado, al vinagre del escabeche que espera sus patatas; ralladura de naranja, azúcar y canela, avellana y café.
Sin duda, la nostalgia engorda en la abundancia de sensaciones y recuerdos que los olores crean.

Aunque todo distinto, hoy repito las magdalenitas de café que tanto disfrutamos hace unas semanas. Eso y un bizcocho de mandarina han sido las novedades en repostería. Hoy toca endulzar el momento con las magdalenitas.
La receta es de aquí

We Love Madeleines

y hasta ahora hemos probado las de naranja y almendras. Faltan por probar las de chocolate y aceite de oliva, pistacho y cardamomo, limón y trocitos de chocolate, limón y semillas de amapola, mango lassi, polenta y romero, bacon y chocolate, naranja y coco... Ya os diré.

Las de café (doble expresso, las llaman) son deliciosas. Creo que en lo que más se tarda es en batir los huevos y en tostar las almendras -- que muelo menos de lo que pide la receta porque me gusta encontrar trocitos aquí y allá.

Esto es lo que llevan:

1/4 taza / 30 gr. harina
1/2 taza / 60 gr. almendras (tostadas y trituradas)
3/4 cucharadita de levadurina
2 cucharadas de café molido (no café instantáneo)
2 pellizcos de sal
2 pellizquitos de pimienta
2 huevos
1/2 taza / 100 gr. azúcar
1/4 taza / 55 gr. mantequilla (derretida) + un poco para untar el molde

Y lo de siempre,
mezclar el harina, las almendras y la levadurna. Añadir el café, la sal y la pimienta. Mezclarlo todo bien. En otro recipiente batir los huevos y el azúcar unos 8 minutos a velocidad media. Aumental la velocidad y batir otros 5 minutos hasta que los huevos tripliquen su volumen y tengan espumita y un color amarillo pálido.
Con un espátula incorporar poco a poco los ingredientes secos en los huevos batidos con el azúcar. Añadir la mantequilla y mezclar amablemente hasta que todo esté bien incorporado.
Calentar el horno a 190ºC. Untar el molde con mantequilla y echar la masa, llenando unas 3/4 partes de cada conchita. 

  



Hornear de 10 a 12 minutos hasta que las magdalenitas suban un poco y los bordes estén dorados.
 

Colocarlas sobre un trapo de cocina y dejar enfriar



Cuéntame como te quedan, ¿vale?

1 comentario:

Tawaki dijo...

Suelo preferir lo salado a lo dulce, pero la verdad es que tienen una pinta estupenda.