Desde que llegué a Carson City me he estado preguntando si esa especie de familiaridad, cercanía y trato personal que siento con y desde la gente es algo que me estoy inventando o que realmente es así. He estado al tanto cada día y cada día la respuesta ha sido la misma: esta gente se siente bien y te hace sentir bien. Tienen sentido del humor, entablan conversación con facilidad, te preguntan, les puedes preguntar... Así fue la bienvenida que nos dieron Anne y Katie, dos de las personas que trabajan en Western Nevada College que han hecho posible nuestra mini-residencia de clases y conciertos, y el festival multicultural que hoy se celebra.
La calidez de esa bienvenida se ha repetido por parte de muchas personas, profesores, estudiantes y la gente con la que hemos estado en contacto. Hablando hoy con Anne, ella me responde a esa pregunta sobre la cordialidad. Me dice que un 85% de la gente que vive en Carson City viene de otro lugar y que todos necesitan encontrar amigos para crear la comunidad. Tal vez eso lo explique y tal vez explique también la diferencia con Wisconsin. Allí Wisconsin la gente también llegó de otra parte pero fue hace mucho más tiempo. Los wisconsinianos son amabilísimos y muy educados, buenas personas, pero tal vez sea la herencia escandinava y alemana es la que les hace ser un poco más distantes y reservados en un primer momento. Luego, cuando te conocen y se abren a ti, sabes que vas a tener un amigo para siempre.
El día ha sido glorioso, uno de esos días de 23º sin humedad, brillante, de colores clarísimos
Un escenario al aire libre va recibiendo a quienes participan en el 13º festival multicultural que abraza la diversidad. Laura y yo abrimos
Cuando terminamos, ya está preparado el siguiente grupo que se hace llamar Note-Ables y cantan y tocan standards, canciones de siempre. La particularidad de este grupo es que todos tienen una deficiencia psíquica o física. Encantadores, mueven al público cantando temas que todos conocen y con los que varias generaciones se pueden identificar
Los tambores de Taiko resuenan poco después. Esos tambores grandísimos ya llevan un rato esperando
pero ahora ya están en el escenario
Me dicen que estos tambores los hacen allí mismo, de barriles de vino, que no son como los que hacen en Japón vaciando el tronco de un árbol (árboles milenarios a juzgar por el tamaño de los tambores).
Luego le llega el turno al grupo danzas irlandesas
y al de danzas de Anatolia
Un poco más allá, los puestos de comida llevan rato ofreciendo apetitosos platillos. Es difícil elegir pero nos llamna la atención las pupusas. Para quien viva en Centroamérica, tal sean algo de cada día pero para mí son una novedad. Sí, son parecidas a las gorditas mexicanas o tal vez a un crepe relleno. La masa de maíz se extiende,
se rellena (en este caso) de carne y queso
y se tuesta en el comal
Se sirve con una especie de col por encima. Umm… exquisita. (No sé por qué ese taco de asada se interpuso en la foto)
Comemos al aire libre, mirando a unos y otros pasar, jugar, charlar... niños y mayores. El sol y el aire poniendo la última pizca de encanto en la pupusa.
Y cómo no, no han de faltar en un festival las muestras y puestos de artesanías que ponen una pincelada más del color de la diversidad. La población latina en Carson City es numerosa. Parte de la tarea de la universidad y actividades como este festival tratan de integrar a ese y otros grupos y crear una interacción más fuerte entre universdiad y comunidad. Hoy me encanta ver a estos niños jugar a la lotería mexicana (que no utiliza números sino imágenes)
o a esta señora escribiendo en japonés y mostrando el significado de los símbolos
Cuando llega la hora de despedirse, se nos hace difícil decir adiós a personas como Lupita
Katie, Anne y muchos otros se nos quedan muy adentro también
Un pedazo de corazón para esta gente que está haciendo algo valioso y significativo, tratando de crear culturas y lazos que integran y eliminan barreras. El mensaje está muy claro y el espíritu de la empresa y de quienes la llevan a cabo también.
5 comentarios:
es un mensaje que comparto plenamente y al que contribuimos todos los días yendo de blog en blog y comentando a personas de todo el mundo
amor
Sí, es verdad. A world without borders, ¿cierto?
Vale, ahora ya tengo claro que los zapatos eran de claqué.
:)
Lo bueno de los EE. UU. es que todo el mundo es de fuera. Ojalá que nunca olviden eso... y cada vez haya más iniciativas como ésta.
¡Qué estampas tan entrañables, Raquel!
¡Y tú ibas muy elegante!
Raquel, menuda envidia me has dado leyendo esta entrada. Yo querría haber estado allíiii, hubiera disfrutado con todo,
Uf, encima lo del taiko me ha recordado unas sesiones ( de taiko, )con Sofía Lopez-Ibor ( no sé si la conoces, vive en USA , San Francisco) en un curso de verano en Santander, hace unos años,que fueron geniales. No lo recordaba!!
Gracias, además el sol que se ve en asl fotos también me encanta!!
Un abrazo
Irreverens,
para las danzas irlandesas esos zapatos de claqué para algunos bailes y las zapatillitas suaves para otras (tengo una alumna que baila y me explica esas cosas).
Fíjate que hay muchos festivales y cosas como éstas pero es de lo que pertenece a la parte de los USA que nunca llega a conocerse.
Elegante, elegante... y cómodo.
Un besote!
Only,
ese solecito... ummmm, ¡¡riquísimo!!
No conozco a Sofía López-Ibor. A ver qué dice google de ella. Pero me imagino las sensaciones y recuerdos.
Un abrazo para ti también
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