Vestimos con los colores del contraste, el cansancio y la vitalidad, la nostalgia y la euforia, la melancolía que nos dispersa y la voluntad que nos empuja, el sí, el no. Mucho de lo que ocurre a nuestro alrededor también se alimenta de contrastes.
Después de tantas fotos claras y luminosas, hoy se me pegan al objetivo éstas de esa otra cara de la nieve
Se irá yendo poco a poco.
4 comentarios:
El Yin y el Yan.
:)
¿Parece que tímidamente empieza la primavera?
Besos
Las escasas veces que nieva en Madrid, el gris es el que prevalece. Tal como caen los copos se ensucian. Una lástima.
Parece que la primavera llama a la puerta...
Besitos/azos.
...y por fin... el barro... del que viene el hombre ¿no?.
La primavera asoma a la puerta... este año la agradeceréis un montón, supongo.
Bicos ;-)
Irreverens,
poco a poco se empieza a sentir. No sabes cómo se agradece.
Mariano,
cuando la nieve empieza a estar así es una porquería, por el día se derrite y por la noche se congela. Es gris. Pobrecita esa nieve flacuchenta que cae en Madrid pero regálame un poco de primavera.
Banderas,
siempre se agradece la llegada del buen tiempo pero este año todos estamos necesitándola como agua de mayo
Un abrazo grande para los tres
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