miércoles, marzo 05, 2008

Fluyendo

entre el sueño y su inocencia

4 comentarios:

Irreverens dijo...

Veo que estás recuperando las fotos que hiciste en el Cono Sur...

¿Serán las ganas de que llegue ya la primavera en todo su esplendor?

Bella estampa, la de la niña.
:)

besotes

Anónimo dijo...

Me gusta mucho. Es como si fuese un haiku japonés acompañado de la imagen que evoca.

banderas dijo...

Jolín, últimamente no hay quien comente. Cuando vi la foto me dije exactamente lo mismo que escribió Irreverens (porque, además, pasé antes por el comentario del post anterior) y, lo del haiku y tu forma de escribir viene de viejo ¿recuerdas?

En cualquier caso, un instante suspendido en el tiempo y en la distancia que separa tu ahora del entonces que fue.

Bicos ;-)

Raquel dijo...

Irreverens,
esta foto vino por la otra, la de la mano.
Aún queda mucho para que llegue la primavera. Trato de no ser impaciente y de alegrarme viendo reaparecer un cachito más de acera o de calle o de tierra bajo la nieve que ya se ve sucia y fea.
Pero me muero de ganas, sí.
Un besote

Rafael,
fíjate que fue Banderas quien en el verano me dijo por primera vez que algo que había escrito parecía un haiku. No sabía lo qué eso era. Ahora me lo dices tú. Debe ser verdad.
Beso

Banderas,
viene de viejo, sí. Le pusiste nombre. Sigue fluyendo.
Un abrazo