No sé muy bien cuándo el barrio valenciano del Cabañal empezó a aparecer en las noticias. Tampoco sé mucho del tema, solamente que quieren tirar el barrio para construir la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez, a la que el ayuntamiento quiere darle salida al mar. De paso, por supuesto, limpiar y sanear esta parte de Valencia que obviamente, contrasta con esa otra zona del centro que vimos el otro día
El Cabañal nació como un barrio marinero y fue municipio independiente (El Poble Nou de la Mar) hasta 1897. Su historia y la actual lucha por conservarlo se pueden leer aquí.
Esta lucha de intereses no es nueva. Por una parte están los políticos y por otra, la gente. Mientras unos sueñan con construir una ciudad que sólo se ajusta a los intereses de unos cuantos, otros luchan por conservar lo que de raíz tal vez les pertenece
Con el paso del tiempo parece que las cosas se han ido complicando. Casas que habían sido abandonadas han sido ocupadas por otros y algunas partes del barrio se han convertido en refugio de indigentes.
Es sábado por la mañana y caminamos por calles donde la gente camina
y vive su cotidianeidad
Por esas calles voy pensando que los mismo intereses movieron a Salamanca para limpiar la ciudad cuando en el 2002 fue capital cultural europea. El barrio chino desapareció por completo. Lo mismo en Barcelona para las olimpiadas. Remozar las ciudades significa deshacerse de gentes y lugares que no encajan con la imagen ideal de lo que debería ser una ciudad. Como si las ciudades no fueran humanas y en ellas no cupiera todo lo que precisamente, las hace humanas
¿Cómo terminará todo esto?
Como contraste, si el otro día entrábamos en el mercado central de Valencia, hoy entramos en el del Cabañal. La cantidad de gente y la vida en este mercado me dicen que sí, que este sí se siente real. No faltan ni gente ni productos de la tierra
Entre otras cosas, compramos chufas
y el señor, muy amable, nos cuenta cómo hacer horchata:
de medio kilo, dos litros. Hay que cocerlas primero, luego licuarlas y colarlas. Azúcar al gusto.
Hoy, además, la gente ya está preparada para el partido de mañana. (¿Acaso no he mencionado que mañana juegan España y Holanda la final del mundial?). Símbolos patrios por todas partes
"4-0 ganamos", me dice.
También aquí personalizamos los triunfos y sufrimos todos la victoria o en la derrota
¿En qué quedará todo esto?
9 comentarios:
¡Qué difícil es conjugar la modernidad con la conservación de la historia! Y más aún cuando los intereses de unos y otros no coinciden.
Quizás el ayuntamiento debería hacer un esfuerzo y expplicar bien las ventajas. Y caso de no haberlas, ser capaz de ofrecer alternativas.
Un abrazo.
Ah la gente! esa eterna olvidada cuando se busca el "progreso"!
Que delicia esos mariscos!
Besotes mil
Enhorabuena por España y disfruten esa copa bien merecida!
Progreso: todavía estoy en duda, no se bien qué es.
Saludos
Tawaki,
efectivamente, muy difícil. La historia se sigue repitiendo, ¿verdad?
Besos
Minombresabeahierba,
ahí compramos calamares y pez emperador. ¡Una exquisitez!
¿Con qué vino lo acompañaría usted, mi señor entendidísimo?
Un besote
Viking,
uf! no sabes ese sentimiento de felicidad generalizada. Y qué bueno, aunque sea breve, pero que sea. Esa roja se portó, ¿verdad?
Lo mismo... progreso... umm....
Un abrazo
Si se hicieran reformas teniendo en cuenta a los habitantes de cada lugar, otro gallo cantaría.
El problema es que todo se decide por intereses ajenos a éstos y desde la frialdad de un despacho aséptico.
:(
Veo que estás empapándote bien de Valencia. A ver qué día te pasas por la vieja Tarraco...
:D
Besotes, Raquel.
Lo acompañamos con un vino que tenga un corte 70% Chardonnay y
30 % Semillón, bien frappé y 100% de usted!
Abrazoteeeeeeee
Vi un documental, hace unos meses, acerca de la zona.
"... Como si las ciudades no fueran humanas y en ellas no cupiera todo lo que precisamente, las hace humanas". Eso es; en vez de preocuparnos de los problemas de la gente, de cómo solucionarlos, nos deshacemos de éllas... Es así.
Me encantan las chufas, aunque haga tiempo que no las coma. Yo las comía, después de un rato en agua, o tal cual.
Un beso.
Irreverens,
estoy totalmente de acuerdo contigo.
Cuando estamos en algún sitio, merece la pena tratar de ver todo lo posible, aunque combinamos playa y hacer nada con los otros viajes.
Muchas ganas de ir a la vieja Tarraco. En algún momento será.
Besotes también para ti.
Minombresabeahierba,
pues me parece ¡¡¡genial!!!
Otro abrazo grande de vuelta
Alegría,
y es una pena que así sea, que no tengamos en cuenta a la gente, ¿verdad?
Besos
Es la eterna forma de hacer las cosas en este cochino y rencoroso país...política de tierra quemada, de edificio ilegal habitado por cien familias "inocentes", de carretera tronzando parques Naturales, el país del chapapote, de arrasar con cualquier cosa para "progresar".
Tal y como es de inculto e incompetente este país, en poco tiempo encumbrarán como héroes a los politicuchos que han cometido un crimen contra la humanidad, porque si algo es patrimonio de la humanidad y lo destruyen, cómo llamaremos a eso?
Hay una película en la que se ve de transfondo todo esto y este maravilloso barrio: "La bicicleta" de Sigfrid Monleón.
Un saludo. Raquel
Publicar un comentario