viernes, septiembre 12, 2008

Los colores te lo dicen

A pesar de todo el verde de los árboles y de la hierba, ya no se pueden ignorar los colores que van asomando. Es el circo vegetal de cada estación, le troupe vestida de septiembre, dorada y vegetal

Llevo ya días mirando el florecer de éstas espigas

Es tiempo, me dicen,

nosotros también tenemos que matizar nuestros colores y nuestro vestido

Es tiempo, me digo.
Dejo la bicicleta junto al camino y me paro al ver ésto

Por fin entro en razón y entiendo que ya no es verano, que el otoño ya llega. Ni siquiera es esa etapa de transición en la que a escondidas esperas que, por alguna razón misteriosamente despistada, el termómetro vuelva a jugar entre los 30. Hay que guardar las sandalias, éstos colores te lo dicen

Y éstos, a pesar de que la luminosidad del día casi juegue a confundir estaciones


En ese fragmento del camino me doy cuenta de la belleza de las etapas

Tal vez no nos gusten las transiciones por la sensación de desestabilización e inseguridad que pueden provocar, pero son las que nos conducen a los diferentes destinos. Una vez allí, el continuo se alimenta de esa maravillosa diversidad de las diferentes estaciones. Mucho en ellas, muchas de sus sutilezas acompañando el hacer de nuestras manos y el devenir de nuestros derroteros

Mirado de lejos o de cerca, así es

Los colores te lo dicen

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Qué maravilla poder relajarse así después de un día agotador! Gracias guapa

isobel dijo...

Que maravilla, la pesada de siempre se postra ante tu forma de mirar, gracias y mil besos

leo dijo...

El movimiento siempre es inestable, desestabiliza, pero nos leva a nuevos equilibrios, que volveremos a perder y...
Sabía yo que tu nuevo otoño no me iba a decepcionar. Maravillosas esas espigas.
Besos.

Irreverens dijo...

mmm... en el fondo, yo soy otoñal, así que ¡bienvenidos sean los cambios!
Además, ¿qué otra cosa es la vida sino una mutación permanente?
:)

Besotes

Raquel dijo...

Anónimo,
qué bien, me alegro haberte podido dejar eso.

Isobel,
anda, anda... igual de pesada soy yo con tus pinturas. Un gusto poder compartir todo esto.
Un abrazo grande

Leo,
así es, un continuo que no termina. Y afortunadamente.
Besotes

Irreverens,
sí, una mutación permanente.
Mariano y tú, otoñales del todo. ¡Llega tu época favorita!
Un besote

dintel dijo...

Me ha encantado la analogía con el circo. También me he relajado leyéndote.

belenmadrid dijo...

jo, siempre que veo tus fotos me dan ganas de comprarme una cámara buena.. pero luego me doy cuenta que no, que me faltaría mucho más :)

Raquel dijo...

Dintel,
umm... esas cosas que salen así, como inesperadas.
Besos

geminisdespechada,
no creo que te falte mucho más. La mirada que sabe lo que quiere ya la tienes... y mucho más. Vamos, adelante.