Han sido caprichosos los cielos de estos días. Hoy el frío dibuja líneas eternas recortadas contra el cielo claro. Ayer, una lluvia de colores, un horizonte nuevo
Entre esos colores digo hasta luego. Salgo mañana para Madison.
Han sido tres semanas que podrían fácilmente haberse alargado más. Estar en casa es siempre intenso, hermoso.
Hoy dejamos el pueblo. Unos parten para Madrid, otros hacia Salamanca. Todos reiniciamos un nuevo trayecto en nuestras rutinas, fortalecidos en muchos sentidos, asomados a la presencia constante del racimo interior que nos sostiene y sustenta.
Han sido tres semanas que han pasado en un suspiro. Colores, olores, memorias, conversaciones, paseos... una ensalada con sabor a granada, chocolate y naranja, siempre algo inesperado
y cierto. Un árbol de atardecer con el que digo hasta luego y junto al que pongo a dormir el recuerdo de estos días
Luego despertarán airosos para recorrerme de nuevo, tal y como como yo los he recorrido junto a vosotros.
8 comentarios:
Y sí a veces los días duran eso, un suspiro, dímelo a mí, que tambien estoy volviendo...tambien con muchos recuerdos. Un beso y abrazo. Buen viaje
Buen viaje, viajera!!!
Entre los cielos del post anterior y estos... ¡qué belleza, Raquel!
Que tengas muy buen viaje, sin retrasos y sin agobios.
Y ya sabes: aquí estaremos esperándote.
:D
Besotes
por qué yo nunca veo el cielo así de ese color tan bonito? es algo de tu cámara? o será que a esas horas estoy siempre en un bar?
Pues que tengas buen viaje hacia Madison.
Como siempre las entradas salmantinas son entrañables.
Hoy nieva en Madrid, y nieva bastante.
Besitos/azos.
me encanta como haces que todo lo que ves siempre se vea bonito, besotes
feliz vuelta, y que regalo tan bonito semejante puesta de sol, besos
Magda,
y volviendo del veranito del sur, además.
Dintel,
creo que sería insoportable estar todo el año en Madison sin poder salir (bueno, digamos que especialmente todo el invierno).
Irreverens,
las conexiones fueron de ataque al corazón pero sobreviví y llegué a destino.
Gracias, y besotes
Geminitas,
porque los cielos de Madrid también son preciosos pero más difícil encontrar el lugar para fotografiarlos, porque tu cámara necesita al menos 3 megas más y porque a vecs, a esas horas, estás en un bar. Pero tu buen corazón compensa todo eso y necesitamos que sigas haciendo las fotos que haces porque tal y como son, son maravillosas.
Mariano,
eso me han contado, que la nevada ha hecho estragos.
El viaje, bien. El sentir a mis amigos virtuales cerca también añade otro punto imprescindible en mi vida.
Besotes
Mnsah,
¿cómo sería al revés?
isobel,
gracias. Aquí estoy de nuevo. Ahora voy a verte.
Besos
Publicar un comentario