La luz madruga en la Huasteca, al gallo, el vendedor de pan. Los bocoles están listos cuando nos levantamos. El café lo tomamos en la plaza. La plaza de nuevo, el centro, punto de encuentro
El tianguis artesanal y de medicina tradicional ya abrió a las diez de la mañana. También hubo un taller de baile de huapango y otro para niños sobre los viejos sones. Junto a otros,
nos sentamos mientras esperamos a que comience la presentación del libro de Gilberto Ortega (don Beto), "Estamos cantándole a la Huasteca".
Conocimos a don Beto la primera vez que vinimos a Citlaltépec. Escribe décimas, una de las formas poéticas que se maneja en la región y que tan buenos poetas cultivan. Tanto en la región jarocha como aquí, la décima (improvisada o escrita) es parte fundamental de la tradición musical.
El encuentro de hoy de las músicas en riesgo presenta a don Lupe Reyes y los Reyes del Refugio.
Don Lupe es el poeta, el compositor de los sones que toca el grupo. Los más jóvenes son sus hijos. Tocan son arribeño, un tipo de son menos conocido que otros fuera de la región o fuera del marco nacional, pero que creo que tiene una carga social considerable.
Quinta, vihuela y violines en el ensamble
Don Lupe nos cuenta que ya tiene 81 años, que sus hijos no escriben versos, que es trabajoso. Nos cuenta de sus comienzos, de estos días en los que ya no están muchos de los músicos con los que tocaban.
Después de su presentación, hablamos de esas "músicas en riesgo", de cómo tratar de no perder tradiciones musicales, del esfuerzo común que hace falta tanto a nivel institucional como individual para que la rica diversidad musical se mantenga. Hablamos de los cambios, de lo que se pierde y lo que queda
La conversación no es nueva y no será la última. Los cambios y las transformaciones son constantes y la música, como todo lo demás, fluye
Hay un momento para fotografiar al poeta con los amigos
mientras se prepara el siguiente grupo
Luego vamos a comer a la palapa de la Iglesia, desde donde el paisaje de la Huasteca se entrega con su generosa belleza
En esa mesa larga compartes con quienes se sientan a tu lado
Los que van llegando se acercan a recoger su plato
Arroz y carne de puerco que hoy no está tan picante (picosa) como ayer porque el chile cascabel es, según dicen, de los que no pican
Nos acercamos a hablar con las señoras que llevan toda la mañana preparando la comida
(Dominga)
y que ya llevan horas preparando los tamales para la cena
¡Ah! Todo esto es alma de la Huasteca, como su música. Calles y esquinas también
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