domingo, mayo 18, 2008

Sencillo y simple

Es emocionante poder presenciar lo más sencillo y simple. Se te queda por dentro y se convierte en una especie de ancla conectada a un baúl de tesoros al que siempre puedes recurrir para que en esos otros días, sinsabores y tristezas se hagan un poco más llevaderos.

Así son el niño que come helado y su mirada,

la risa en el juego también

Sencillo, simple y lo único que en esos momentos existe.

10 comentarios:

dintel dijo...

Gracias, porque esta vez... necesito lo sencillo y lo simple.

Irreverens dijo...

Disculpa que asocie esta entrada tuya de hoy con la mía de ayer... pero es que como va de niños, diré: "ojalá fuera así de sencillo y simple para todos los niños del mundo".

[La primera foto es absolutamente divina.]

Besotes

Anónimo dijo...

Me haces caer en la cuenta de que al lado de mi hijita cuando va correteando, o echándole gusanitos a los patos, etc. parece que la Tierra deja de girar, el minutero de avanzar, y complacido vives sumergido en ese instante. Dicen que de quienes son como ellos es el reino de los cielos. Opino que el reino de los cielos es un acogedor salón con chimenea en el interior de tu corazón del que la mitad de las veces has perdido las llaves. Se me antoja difícil y complicado ser como ellos. ¿Bastará con anhelar lo sencillo, lo simple, el instante tan sólo? ¡Uf, mejor sigo pensando otro día!

JESUS y ENCARNA dijo...

los pondré tambien en mi baul, con tu permiso, por si se me tuerce el dia, aunque, como dice Irreverens, el mundo no es asi de sencillo y alegre para todos los niños del mundo
Besos
Encarna

isobel dijo...

sonrisas y carcajadas de esas que te llenan de vida, besitos

leo dijo...

Cómo añoro esos tiempos, en los que la risa valía por sí misma, en que los ojos sólo podían mirar como los de ese niños, en los que todo era así: sencillo y simple.

winfried dijo...

La risa de un niño llena de alegria cualquier alma!!

Kisses

Raquel dijo...

Dintel,
un pequeño respiro en esa sencillez,
y un abrazo.

Irreverens,
sí, inevitable no pensar en las dos entradas juntas y pensar también en esos otros niños a quienes desde muy temprano les robaron la risa.

Rafael,
¡quién sabe! Para el niño es así, para nosotros es muy difícil perdernos en ese reino sin llaves. Pero ahí también está la belleza de la vida con todos sus contrastes y veredas.
Un abrazo

Encarna, ponlos en tu baúl porque hay muchos días que realmente hacen falta. Ese momento es así para esos dos niños y aunque su otra cotidianeidad sea diferente, nada que ver con cruda realidad que otros viven.
Saludos y gracias por llegarte hasta aquí

Isobel,
y bellísimo el sonido de esas carcajadas...
Besos

Leo,
ya no podemos, ¿verdad?

Winfried,
sí, de verdad.
Kisses for you too

Tawaki dijo...

Ojalá fuésemos capaces de recrearnos en estos momentos más a menudo.

Abrazos.

Raquel dijo...

Muchas veces ni asoma la posibilidad de tener esos momentos o ni los buscamos. Pero sé que nos hacen falta.
Un abrazo