No existe. Por mucho que se quiera añadir un día más al mes, no es posible. Es sólo que hoy el cartel que Jaime Yañez envía para anunciar las clases de don Elías Meléndez en La casa de la cultura de Tuxtepec, me trae muy entrañables recuerdos
Por eso, de alguna manera, quisiera que el mes durara un poco más, alargarlo casi hasta el jueves y así recibir una clase de jarana y con eso, entender que el tiempo y el espacio se pueden desdoblar como los antojos de la música con todas su sutilezas.
6 comentarios:
Raquel, si que existe el treita y dos y el cuarenta de mayo...se dice por Galicia: Hasta el cuarenta de mayo la vieja no saca el sayo...quiere decir que sigue abrigadita...porque el frío le puede...
Un gran trabajo, gracias.
Raquel, si que existe el treita y dos y el cuarenta de mayo...se dice por Galicia: Hasta el cuarenta de mayo la vieja no saca el sayo...quiere decir que sigue abrigadita...porque el frío le puede...
Un gran trabajo, gracias.
Eso está genial. Nos iremos a vivir a Galicia para poder tener algún día más, ¿no?
Un beso
Hola, vengo del almacén del los días perdidos hasta estos ecos del sonar. Me han encantado tus entradas sobre mi país, este México en el que la jarana suena a pesar de la violencia instalada en el seno de la sociedad. Me da alegría que puedas disfrutar del color y la música de la gente rechula que existe en muchos rincones de mi tierra.
Wastedcherry,
tienes mucha razón, la jarana suena a pesar de la violencia y no puede ser de otra manera. Da mucha pena lo que está pasando pero confiemos en que en algún momento haya un punto de retorno.
Gracias por comentar y hasta pronto
Buen blog, excelentes entradas, me quedo como seguidor.
Un beso desde Argentina.
Humberto.
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