domingo, julio 01, 2007

En medio de

Me llevas a caminar cuando la tarde se pierde y recorremos la llanura en silencio
No es estío, no huele a forraje, a centeno, a paca en espera; no es el olor del calor ni el aire de grillos y duendes iluminados en sus gusanitos de luz.
Nos quedamos quietas en ese cerco que nos toma en sus manos y que nos deja susurrar en medio de la nada, esquivando el aire

Atardece y la luz se va convirtiendo en caramelo de miel y menta en medio del silencio, su frescor surcando la garganta, dulzura lejana

Esquiva, la belleza de estos campos no se entrega a cualquiera. No provoca, no se hace evidente, no invita. Pero añoran. El tiempo te los entrega y con él aprendes los matices de su extensión y su existencia, la riqueza en su austeridad, la necesidad de la encina y sus dos orillas, y el camino en medio de dos mundos de contrastes, luces y sombras

No titubea este sol mientras se pierde en la honestidad de la tierra. Es hermoso y cierto

No pide ni solicita atenciones; su estela es la huella en medio de la infinita aventura de su horizonte, su gran amante.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Gracias por brindarnos esas maravillosas fotografías de un día que se va, pero que nos deja un agradable recuerdo.

Raquel dijo...

Estefani, un gusto poderlas compartir.
Gracias

Anónimo dijo...

Imagino que las fotos las haces tú ¿no? Que barbaridad, preciosisisimas!!!

Raquel dijo...

Sí, las fotos son mías. Contadas veces utilizo fotos de otros y cuando lo hago, le doy crédito al fotógrafo/a. Es fácil hacer esas fotos cuando lo fotografiado se deja y hasta casi te invita a hacerlas